Si te incorporaste en una red de franquicias, seguramente alguna vez te has preguntado: ¿para qué me metí en esto?
Con esta serie de preguntas te ayudaremos a desglosar los verdaderos motivos de tu posible descontento. Al final sacarás tus propias conclusiones
ANTES DE INVERTIR EN TU FRANQUICIA
- ¿Cuánto tiempo le dedicaste a comprender como funciona el sistema?
- ¿Qué te llevó a decidirte en su momento? y ¿Cuáles eran tus circunstancias en aquel contexto?, ¿tenías otras opciones?
- ¿Elegiste el rubro que más te gustaba o lo elegiste por otras razones?
- ¿Consultaste a algún profesional especializado en la materia?
MIENTRAS OPERAS TU FRANQUICIA
- ¿Quién te hubiera acompañado si hubieras emprendido solo?
- ¿Es la franquicia o la economía del país, la que te genera este resquemor?
- ¿Qué es lo que te incomoda?: ¿El sistema, tu franquiciante o lo difícil de llevar el negocio adelante?
- Después de haber operado por un tiempo tu franquicia, ¿Hiciste un listado escrito de los pros y contras de permanecer en ella?
DESPUÉS DE ABANDONAR LA FRANQUICIA
- Dejando de lado la experiencia que adquiriste operando tu franquicia, ¿Te hubiera ido mejor operando un negocio independiente?
- ¿Analizaste los verdaderos motivos de tu decisión de salirte de la franquicia?:
– Poco o mucho tiempo de dedicación al negocio.
– Mala ubicación comercial, mucha competencia.
– Falta de asistencia y comunicación de la franquiciante.
– Problemas de abastecimiento.
– Problemas con el personal, de seguridad, de alquileres altos, de la economía.
– De todo un poco
Si como franquiciado expresas estar arrepentido, necesitas meditar en ello, para conocer las verdaderas causas y tu real grado de disconformidad.